lunes, 8 de mayo de 2017

GEODA DE AZÚCAR Y AZÚCAR (III). GEODE SUGAR AND SUGAR (III)




Seguimos experimentando con la geodas de azúcar.
Ésta es la tercera manera de hacer geodas comestibles.
Nuestra cocina parecerá un laboratorio!!!!..... jejejejejeje….. estamos en clase de química o haciendo decoraciones para repostería?????.
Que nadie se confunda!!!!..... la cocina efectivamente a veces parece un laboratorio y pueden salir cosas tan flipantes como las geodas.
Empecemos a desvelar el misterio del proceso.
Adelante!!!!


INGREDIENTES
No pongo cantidades concretas en gramos porque depende de la proporción y de la cantidad que queráis hacer.
Las medidas van por tazas, si queréis hacer poca cantidad escoger una taza pequeña, o por el contrario si queréis hacer más cantidad entonces escoger una más grande.

Para el sirope:
1 taza de agua
3 tazas de azúcar blanca normal
Colorante alimentario para el interior de la geoda

Para el exterior
Azúcar blanco normal granulado (unas cucharadas)
Colorante alimentario blanco (opcional)
Azúcar moreno normal granulado (unas cucharadas)
Unas gotas de agua


PREPARACIÓN
Como expliqué en la entrada anterior hay tres maneras de hacer las geodas. 
El sirope de color que hará los cristales del interior es común para las tres maneras.
El exterior, o sea, la parte que parece "piedra" es lo que cambia.

Así tendremos estas tres formas:
- con recubrimiento de chocolate
- con recubrimiento de fondant
- con recubrimiento de azúcar (es la que os explico en esta entrada)

Primero vamos a preparar el sirope de azúcar.
Es el mismo proceso que en la entrada anterior de “GEODA DE AZÚCAR Y CHOCOLATE”  y “GEODA DE AZÚCAR Y FONDANT” pero os lo vuelvo a explicar.
A lo mejor alguno/a de vosotros/as recuerda haber hecho este experimento en el colegio en clase de química o ciencias.
Lo que vamos a preparar es una saturación extrema de azúcar disuelto en agua…… concretamente tendremos que disolver tres tazas de azúcar en una taza de agua. Conseguiremos una disolución extra de azúcar,….o lo que es lo mismo, un sirope súper-concentrado.
Lo haremos por partes.
Ponemos a calentar en una olla una medida de agua y echamos una medida de azúcar.


Vamos removiendo continuamente. 


Cuando se empiece a calentar añadimos la segunda medida de azúcar.
Seguimos removiendo y veremos que el grano de azúcar se va disolviendo a medida que el agua se calienta.
Añadimos la tercera medida de azúcar y seguimos removiendo.
Ahora le costará más tiempo disolverse el azúcar porque el líquido está muy saturado de azúcar.
Pero…… tranquilidad!!!,… seguimos removiendo y veremos que el grano de azúcar se irá disolviendo hasta desaparecer el grano.
Entonces retiramos del fuego.

Os puede pasar que el sirope os empiece a hacer burbujas, entonces hay que retirar del fuego porque no queremos que se tueste y coja color marrón, si empieza a hacer burbujas entonces seguro que el grano de azúcar tiene que estar disuelto y ya no se ve.

A lo mejor vemos que el grano de azúcar se disuelve antes de que la mezcla comience a burbujear. No pasa nada.
Lo importante es que el grano de azúcar se disuelva. Ese es el momento en que retiramos la mezcla del fuego.
Ojo!!!!!!,…. Repito aunque me haga pesada,…. Es importante no dejar hervir la mezcla del sirope porque puede tomar un color tostado.

Cuándo podemos incorporar el colorante?
El colorante lo podéis añadir en cualquier momento.

Es decir, si lo queréis todo del mismo color podéis añadirlo cuando le incorporéis la tercera medida de azúcar cuando estamos calentando la mezcla.

Por otro lado si queréis hacer varios colores, vertéis a parte el sirope ya hecho ( y bien disuelto el azúcar) en varios cuencos como colores queráis y le ponéis el colorante diferente en cada cuenco.

Os aconsejo añadir el colorante poco a poco para ir controlando el color.
En mi caso quería un solo color, el lila, como las amatistas naturales.
Fui mezclando rojo y azul hasta lograr el color lila deseado. 


Cada poco con una cuchara sacaba un poco de sirope y ponía unas gotas en un plato blanco hasta conseguir el tono deseado.


Bueno, …… pues ya tenemos el sirope coloreado y muyyyyyyyy caliente!!!!!,….cuidado de no quemarse!!!!. Lo reservamos un momento.

Ahora vamos a preparar nuestras formas-recipientes.
Buscaremos un recipiente, bol, cuenco, plato, fuente, etc ….. que nos sirva como recipiente contenedor de nuestra forma de geoda.
Puede ser del tamaño que más os guste.
Solo hay que tener en cuenta el volumen del sirope que hemos fabricado para preparar los recipientes necesarios.
Con trozos de papel de aluminio hacemos unas bolas o formas irregulares y las ponemos dentro del cuenco. Las vamos poniendo como nos parezca.

 

Preparamos una doble hoja de papel de aluminio algo más grande del tamaño del cuenco que vayamos a utilizar.
Ponemos el papel de aluminio forrando el interior del cuenco y dejando un poco de sobrante por los bordes del cuenco.
Podemos arrugar un poco el papel, así con los trozos-bola que ya habremos puesto antes, harán que la forma sea irregular y parezca más una piedra.



Cortaremos un trozo grande de papel de aluminio y colocaremos el cuenco en medio. El papel debe ser lo suficientemente grande para después poder cerrar el papel con el cuenco dentro.

Ahora vamos a “fabricar” el exterior de nuestra geoda que tendrá que tener una apariencia de “piedra”.

Primero haremos la capa exterior de color piedra.
Para ello pondremos a calentar en una sartén unas cucharadas de azúcar moreno, …… yo le he echado 4 cucharadas, pero la cantidad depende del tamaño del molde que hayamos “fabricado”.


Le añadimos un poco de agua, pero no mucho, solo lo necesario para que se humedezca el azúcar pero que no se disuelva. Queremos mantener el aspecto granulado.


Removemos.
Cuando veamos que el azúcar empieza a amontonarse en grumos.....



...... lo echamos rápidamente en el interior del molde de aluminio y lo extendemos con la ayuda de una cuchara. Vamos extendiendo. Hay que hacerlo rápidamente porque se endurecerá rápido.


Dejaremos que se enfríe. No tardará casi nada.

Ahora vamos a preparar el recubrimiento interior blanco.
Haremos el mismo proceso que el anterior.
Pondremos unas cucharadas de azúcar blanco a calentar en una sartén. 
Humedeceremos el azúcar con unas gotas de agua, lo suficiente para humedecerlo, no para que se disuelva.


Queremos mantener el granulado del azúcar. Vamos removiendo y cuando veamos que se empieza a amontonar lo echamos por encima de la capa de azúcar moreno que tenemos en nuestro molde.


Lo extendemos rápidamente con una cuchara formando una capa interior y dejamos que se enfríe por completo.
Esto le llevará aproximadamente 15 minutos porque tienen que enfriar completamente las dos capas de azúcar.

Para potenciar el color blanco yo le he echado dos gotas de colorante blanco en el azúcar junto con las gotas de agua. Así logro que la capa blanca sea más blanca. Pero es opcional. Si no tenéis colorante blanco no os preocupéis porque también os quedará bien.

Una vez completamente frías las capas de azúcar verteremos el sirope de azúcar en el interior de la forma que tenemos de azúcar endurecido.
No hay que llenarlo hasta el borde de las capas de azúcar porque corremos el peligro de que se desborde el sirope y nos manche la parte exterior de nuestra “piedra”.

Cerraremos el papel de aluminio exterior con el cuenco dentro para evitar que le caiga polvo dentro del sirope.
Pondremos el cuenco en un lugar que podamos dejarlo sin mover como mínimo 24 horas.
Si queremos que los cristales que se formen sean más grandes tendremos que dejar reposar el sirope más tiempo. Yo los he tenido tres días.

Una vez transcurrido el tiempo que queramos, abriremos el papel exterior de aluminio.
Veremos que en la superficie del sirope se ha formado una capa dura de azúcar. Con un tenedor podemos romper esa capa y sacar los trozos.


A continuación vaciaremos el líquido que aun haya quedado.

 

Pondremos nuestra “roca” a escurrir para que no quede nada de líquido. Para ello la dejaremos escurrir del revés sobre un vaso puesto en un plato.


Yo lo he dejado de un día para otro para asegurarme de que no queda sirope.
Retiramos el papel de aluminio.


Si vemos que ha quedado un borde de roca demasiado ancho hasta el nivel donde empiezan nuestros cristales de geoda, entonces podemos ir rompiendo el borde con cuidado utilizando los dedos.


Tachaaaaaaaaaannnnnnnnnnnn!!!!!!!!!
Nuestra geoda está lista!!!!.
Fijaros como queda el aspecto exterior de nuestra roca y los cristales que se han formado en el interior.


Queda muy bonita……. El color del azúcar moreno le da un toque especial como si fuera una piedra.
Con esta técnica del azúcar se consigue una geoda con una textura especial y una semi-transparencia del azúcar que lo hace muy atractiva.
Es impactante!!.



Que os parece a vosotros????.



Si os animáis con el experimento me gustaría que me explicarais vuestra experiencia y me mandarais alguna foto de vuestro resultado para compartirlo.
Os dejo un video para que veáis el resultado en movimiento.


Seguro que conseguiréis grandes resultados!!!!



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